A la hora de hacer las compras, las personas mayores de 65 años deben tener en cuenta una dieta equilibrada que favorezca la salud general. A continuación se ofrecen algunas recomendaciones:
- Frutas y verduras: Elija variedad de colores y tipos, preferiblemente frescas o congeladas sin aditivos. Son ricos en vitaminas y fibra.
- Granos integrales: elija pan integral, arroz integral, avena y pasta integral. Son fuentes de energía y fibra.
- Proteínas magras: Incluye carnes magras, pescado, huevos, legumbres (como frijoles y lentejas) y productos lácteos bajos en grasa. Estos ayudan a mantener la masa muscular.
- Grasas saludables: Los aceites como el de oliva, el de aguacate y los de frutos secos son buenas opciones que aportan ácidos grasos esenciales.
- Lácteos o alternativas: Busque productos ricos en calcio y vitamina D, como yogur, queso y leche fortificada.
- Snacks saludables: Los frutos secos, las palomitas de maíz sin sal y las barras de granola pueden ser snacks nutritivos.
- Hidratación: No olvides incluir agua, infusiones y caldos bajos en sodio.
- Suplementos nutricionales: En caso necesario, considerar productos específicos que ayuden a cubrir deficiencias nutricionales, siempre bajo consejo médico.
Al planificar sus compras, es útil revisar las etiquetas para evitar productos con alto contenido de sodio, azúcar agregada y grasas saturadas.